Belleza.

Nos rodea, esta tan cerca y en tantos sitios que muchas veces no somos capaces de verla, un día la ves en el sitio más cotidiano y te asombra, te deslumbra, irradia ese algo que a todos nos llena, nos rebela secretos, nos da fuerzas.

Solo tiene un problema y es que a veces estamos tan centrados en nosotros mismos que nos olvidamos de verla, de descubrirla en el lugar menos esperado, de vivir con esa visión del mundo en el que la belleza esta en cualquier rincón, como si todo estuviera formado por belleza, que al fin y al cabo podría ser.

Y un  día vas a aquel lugar al que llevas yendo desde siempre y la belleza te deslumbra, ¿Cómo no pudiste verlo antes? ¿Cómo pudo pasar inadvertido? ¿Como estuvimos tan ciegos? La verdad, no, no se la respuesta, pero me importa poco, porque la ví, porque descubrí a la belleza, porque desde ese  momento, mi vida se ha llenado de belleza, el mundo se ha convertido en algo precioso y cada vez que veo esa belleza, estoy más contenta y orgullosa de haberla encontrado, porque saca sonrisas sin ni siquiera darte cuenta, porque te grita ¡Lo conseguirás! Porque nunca me imaginé, que todo tuviera esa visión que te llena de vida, porque me hizo descubrir, que no todo es lo que parece, que todo tiene una cara bella y que si quieres puedes vivir así, pero lo conseguirás cuando seas capaz de olvidarte de aquello que te hace daño y en un segundo, encontrarás la paz en el mundo, podrás ver aquello que tantas veces nos hemos perdido, que la mayoría del mundo no es capaz de ver, aquello que es donde tenemos la suerte de vivir, donde te puedes encontrar a la persona más bella del mundo, porque aunque alguna vez lo hayas dudado, esas personas están en el mundo y un día sin saberlo te cruzas con ellas y te muestran la belleza que se puede llegar a tener, que se puede llegar a irradiar, que puede sacar sonrisas.

La vida es tan bella como tú la quieras ver.